¿Qué estás pensando?
¡Y dale con Permía!
Yo podría contestarle: ¿Qué carajo le interesa a usted
lo que yo pienso?, o comportarme como un enser civilizado, educado por las
caramelitas descalzas y decirle: ¿no sea usted tan curioso!... y... ¡ mandarlo
a la mierda, con perdón!
Pero... como llueve, hace frío y no puedo ir a
pescar... lo más idóneo en estas circunstancias, es tratar de perder el tiempo, aunque sea contestando preguntas
impertinentes.
¡Estoy pensando en nimiedades!. ¿Satisfecho?
¿En qué nimiedades?
En nimiedades nimias.
Yo sé que en un país con cinco millones de parados
y un Mundo donde la Naturaleza nos obsequia todos los
días, con vendavales, tornados, tsunamis que matan miles de personas... pensar
en nimiedades es más propio de enseres indeseables que de personas responsables
y solidarias...
Pero menda o sea yo, odia las inutilidades... y todo
lo que yo piense no vale un rábano... si tenemos en cuenta
la cantidad y
calidad de pensadores que habemus en este maravilloso país...
¿Para qué vamos a pensar nosotros, modestos
viandantes, si todos los ministros que nos gobiernan
no hacen otra cosa... además de farfullar por la TV
todas las genialidades que sólo ellos son capaces de imaginar?
Si algo grane hubiera que pensar, lo más productivo
sería en ver la forma de hacerse Tesorero del PP, del PSOE, de CIU, UGT...
CC.OO... o Banka la Bankia...
Pero éso... ¡ni siendo amigo de Rajoy es fácil! Hay
¿cómo se dice? ¿overbooking?. ¡Eso!
¡Y además, agora, les ha dado a los jueces el
gusanillo de meter en cana a los chorizos. ¡Sin retroactividad... eso sí y sin
mirar paternazgos o yernazgos...!
¡O casi que!
¡Mejor... ir a pescar... aunque sea lloviendo y caigan
chuzos!
¡Arriba el derchi!