LOS APÓSTOLES
..........Conferencia evangelizadora de Sande
Sande, ante un nutrido grupo de turistas en los Marorrales de Saretela.
Los apóstoles eran
unos hombres rudos y raudos pa los mandados que Jesús de Nazaret, hijo de José
y María, eligió entre sus seguidores, con el fin de promover la doctrina
cristiana, de su propia autoría.
Eran todos gentes del pago o séase
judíos de Judea, Galilea, Cafarnaum y de zonas adyacentes... y casi todos con
barbas bíblicas, como las del Patriarca Abraham... por lo que todos sabían muy
bien aquello de que cuando las barbas del vecino veas arder, pon las tuyas en
remojo...
Eran gente avisada, curtida en mil
batallas por la supervivencia, pescadores de solvencia contrastada, tanto en
las capturas de peces a la caña o al palangre...
Jesús tuvo buen cuidado de
prepararlos a fondo para su Apostolado.
No los mandó a predicar el Evangelio sin armas. Muy por el contrario, los dotó de todo lo
necesario para que el éxito de sus predicaciones por todas las orbes y urbes,
fructificaran adecuadamente... y así fue nomás... porque en poco tiempo, las
doctrinas cristianas le dieron la vuelta al Mundo como si fuera un calcetín.
La Paz, la Humildad, la Caridad y el
cumplimiento de los Mandamientos
de la Ley de Dios... el primero de
los cuales es amarlo a Él sobre todas las cosas, triunfaron sobre la Soberbia,
la Avaricia y la Vanidad.
Los ricos se desprendían de sus
cuantiosos bienes... y se llenó el cielo de ricos...
Los pobres adoraaban a Dios, porque
aún sin anzuelos pescaba peces y del agua hacía vino, sin necesidad de
vendimias, fermentación de las uvas ni zarandajas de ninguna naturaleza...
La fama de Jesús, no tuvo parangón. Ni
Robert de NIro en la actualidad, ni
José Maria el Tempranillo en su
época ni el Alcalde de Zalamea en la suya, le llegan a media pierna a la fama
de Jesucristo Quitolis Pecata Mundi. ¡Ni siquiera Maradona...!
Ustedes... mis queridos turistas
extranjeros, deberían leer los “Hechos de los Apóstoles” de San Pablo... que no
fue uno de los Doce... pero fue el responsable número uan de que este Planeta
no sea ateo. Me refiero a Pablo de Tarso
o Metatarso, no recuerdo bien... aquel que se cayó del caballo, camino de
Jalisco, digo Damasco, se golpeó la nuca y cuando volvió en sí, se encontró con
que era más crisrtiano que Cristo. Se
fue a London, hizo una catedral, se fue a Barcelona hizo un Hospital, se fue a
Corinto, escribió cartas a los efesios y se puso de acuerdo con San Pedro, para celebrar conjuntamente, su onomástica el día 29 de Junio de todos
los años, incluidos los bisiestos.
Agora... váyanse mis amigos, a comer
los pepinillos a las brasas, plato típico de esta Comarca saretela y otro jour les
contaré la extraordinaria life de Don Torcuato Tasso, el hombre del bigorazo,
al que quiso emular el Salvador.
Dalí, el del Museo de Figueres.
Dominus vobiscum!
¡Et cum me!
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