¡Y pensar que hace unos años, era mia...
y se fue con un vascón pa Saretela,
calzándome este cuerno en mi cazuela
y más tirau que un pucho en la Gran Vía!.
Lejos quedaron sus cantos, sus sonrisas,
sus mohines y apasionados besos
y cerca me veo de mi fatal deceso
en medio de mis noches, sin sus "Visas"
¡Se acabaron los quesos de Cabrales,
paellas, langostinos y gambones
que, maestra en el arte de saciar lambones,
me obsequiaba los lunes... a raudales...
Ahora... aquí me ven, como un ciruja,
echando fuego, por las fauces
y ya por más problemas que me causes...
¡Ya en de jamás, dejaré de ser maruja...!
.
Des Kisio
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario