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Meditavagaciones
Meditavagaciones
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Acomodado en mi escritorio, con las dos manos en la sabiola, me dediqué más de una hora, a pensar… Un homenaje a "El pensador" de Rodín, que lo tenemos acá, de prestado por una temporada, en esta Corte de los Milagros.
¿Sabés en qué pensé…?
En la correlación que a veces existe, entre la vida virtual y la real en la sociedad de San Sebastián y otras poblaciones.
Vamo a sé concretos:
Entre mi vida virtual y mi vida real y pedestre.
Fijate… que yo amo y respeto a todos los ciudadanos del mundo, excepción hecha de ingleses, franceses y suizos. ¿Motivos? Innumerables. Sólo mencionaré algunos pa no ser tan gastaletras como Planchón.
A los ingleses, no los quiero en realidad, porque siempre jueron unos piratas sabandijas que nos ganaron la batalla de Trafalgar, sin que se la llevaran de arriba, pues le liquidamos al Almirante Nelson.
A los franceses, porque toda la vida, anque el Cachou me nombre a Vercingétorix, jueron unos maulas y por su culpa, perdimos esa batalla, porque con los primeros cañonazos, Monsieur Villaneuve, salió corriendo como un conejo, gritando . ! Sálvese quien pueda…! y se volvió pa Tolón Tolón con sus naves y sus cañones sin estrenar.
Y de los suizos, porque se aprovecharon de los judíos que escapaban de los nazis y sólo dejaron pasar a los que estaban bien forrados, a los que esquilmaron con menos escríupulos de los que tuvieron Isabela y el Fernando, cuando los expulsaron de España. Y además por ser banqueros relojeadores, comedores de toblerones.
En la vida virtual, fijate por donde se dan los mismos aconteceres. Mis adversarios están precisamente en la Albión, en la "dulce France" y en la chocolatera Suiza.
Y debo proclamar que, este fin de semana, jué glorioso para mi. Gocé como un pichicho, regodeándome con el sufrimiento de mis enemigos más acérrimos. Los ingleses pasaron una semana aciaga. Perdieron al fóbal con Rusia y están cuasi eliminados del Europeo. Los sudafricanos, se los merendaron en rugby y el Ron Denis ese… quedó aguau. El Hamilton, pariente… mire usté, de la esposa del mesmésimo Nelson, ella era rubia, perdió como un patón, la carrera de Interlagos.
A los franceses hasta los argentinos los vapulearon en su Campeonato de ese juego de las montoneras. Ya no ganan a nada… ni a las canicas.
Y Suiza… Los suizos lo único que tienen es plata. Pero no suya… ¡eh!... De los demás, sobre todo la de los chorros de todo el Mundo. Su gran Campeón, Roger Federer, jugador de pelotita de tenis, ayer mesmo, lo revolcó en Madrid, un argentino, que por cierto se morfó al número 1 y 2 y 3 del Mundo, como quien se morfa un cruasán con azúcar. En Suiza, ganaron las elecciones los nazis. Con eso … les digo todo… ! Qué paísillo…!
Y yo… pos que estoy contento, porque la gozo, cuando los tramposos pierden.
Y ya me pasé de folios. Y se me cabrea el Ventura. A él le gustan más los dibujitos que las prosas. Y la verdad… que a mi también…
! A la Pá de Dio…!
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¿Sabés en qué pensé…?
En la correlación que a veces existe, entre la vida virtual y la real en la sociedad de San Sebastián y otras poblaciones.
Vamo a sé concretos:
Entre mi vida virtual y mi vida real y pedestre.
Fijate… que yo amo y respeto a todos los ciudadanos del mundo, excepción hecha de ingleses, franceses y suizos. ¿Motivos? Innumerables. Sólo mencionaré algunos pa no ser tan gastaletras como Planchón.
A los ingleses, no los quiero en realidad, porque siempre jueron unos piratas sabandijas que nos ganaron la batalla de Trafalgar, sin que se la llevaran de arriba, pues le liquidamos al Almirante Nelson.
A los franceses, porque toda la vida, anque el Cachou me nombre a Vercingétorix, jueron unos maulas y por su culpa, perdimos esa batalla, porque con los primeros cañonazos, Monsieur Villaneuve, salió corriendo como un conejo, gritando . ! Sálvese quien pueda…! y se volvió pa Tolón Tolón con sus naves y sus cañones sin estrenar.
Y de los suizos, porque se aprovecharon de los judíos que escapaban de los nazis y sólo dejaron pasar a los que estaban bien forrados, a los que esquilmaron con menos escríupulos de los que tuvieron Isabela y el Fernando, cuando los expulsaron de España. Y además por ser banqueros relojeadores, comedores de toblerones.
En la vida virtual, fijate por donde se dan los mismos aconteceres. Mis adversarios están precisamente en la Albión, en la "dulce France" y en la chocolatera Suiza.
Y debo proclamar que, este fin de semana, jué glorioso para mi. Gocé como un pichicho, regodeándome con el sufrimiento de mis enemigos más acérrimos. Los ingleses pasaron una semana aciaga. Perdieron al fóbal con Rusia y están cuasi eliminados del Europeo. Los sudafricanos, se los merendaron en rugby y el Ron Denis ese… quedó aguau. El Hamilton, pariente… mire usté, de la esposa del mesmésimo Nelson, ella era rubia, perdió como un patón, la carrera de Interlagos.
A los franceses hasta los argentinos los vapulearon en su Campeonato de ese juego de las montoneras. Ya no ganan a nada… ni a las canicas.
Y Suiza… Los suizos lo único que tienen es plata. Pero no suya… ¡eh!... De los demás, sobre todo la de los chorros de todo el Mundo. Su gran Campeón, Roger Federer, jugador de pelotita de tenis, ayer mesmo, lo revolcó en Madrid, un argentino, que por cierto se morfó al número 1 y 2 y 3 del Mundo, como quien se morfa un cruasán con azúcar. En Suiza, ganaron las elecciones los nazis. Con eso … les digo todo… ! Qué paísillo…!
Y yo… pos que estoy contento, porque la gozo, cuando los tramposos pierden.
Y ya me pasé de folios. Y se me cabrea el Ventura. A él le gustan más los dibujitos que las prosas. Y la verdad… que a mi también…
! A la Pá de Dio…!
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