“No hay mal que por bien no venga... ni mal que cien años dure...”
¡Pues que quiere que le diga Onofre! ¿Que los refranes son como los horóscopos?
Pues. sí señor.
¿Que no hay mal que cien años dure...?
¿De qué cien años me hablan...? Mire, Onofre... Este Planeta ¡qué cien años!, millones de años hace, que le duele la barriga y a nadie se le ocurrió todavía, darle a tomar una infusión de romero o caléndula y un arroz blanco, para evitar sus crónicas cagarrinas...
Este Planeta, Onofre, tras mucho peregrinar andá a saber por que Galaxias... apareció un día por estos Firmamentos, encontró casualmente, una órbita adecuada a sus características y como sapo de otro pozo, tímidamente, empezó a dar vueltas, sin detenerse jamás ni a repostar o comer un bocadillo. ¡La órbita hay que cuidarla y no es cuestión de que por un descuido, algún okupa, lo deje de nuevo en la calle.
Son tantas las vueltas que da y tan rutinarias que se aburre.
El aburrimiento no encastra muy bien con las cagarrinas... y así está él, el pobre Planeta. ¡Qué se va por el caño... vamos!
Yo no sé en que momento del dia o de la noche de uno de todos estos millones de años que lleva girando... – nosotros - nos subimos a él.
Sé que era un lugar muy inhóspito y con serias deficiencias como para poder vivir con ciertas comodidades.
Abundaba el agua pero escaseaban los alimentos. Carecía de infraestructuras elementales, como puentes, autopistas,
vías férreas... y por no haber, no había ni siquiera hoteles en los que alojarse ni ferrys para ir a Mallorca.
Cuándo el Planeta empezó a experimentar los primeros síntomas de mal de barriga... lo ignoro. Sospecho que ocurrió cuando se cercioró que la carga de hombres que llevaba a bordo, le resultaba cada vez más pesada, debido a la desmesurada proclividad de las mujeres a las frecuentes pariciones múltiples.
Fijate, Onofre, que en este Planeta, al principio hubo un sólo García... y ¡andá a contarlos ahora...! ¡Esa un abuso!
El hecho concreto, Onofre, es que en cualquier momento, nos va a desahuciar. Se va a encabritar y como perro que se sacude sus pulgas, nos va a mandar pa Almendralejos...
De cualquier manera, el mal no habrá durado sólo cien años, como dice ese cateto refrán... Ya van varios miles de años y la disentería, gastroenteritis, colitis...¡cagarriinas!, de nuestro Planeta, no cesan....
Y es que:
“No hay mal que dure menos de cien años”
y
“No hay bien que nos venga bien”
El burro con sus orejeras y los ojos tapados, sigue dando vueltas a la noria, subiendo los cangilones de agua, cada vez más contaminada.
.
Des Kisio.
.
No hay comentarios:
Publicar un comentario