Un payador otomano nos ha llegau de Estambul, trae repleto el baúl
de escopetas y petardos y una cesta de nardos con una bandera azul.
Yo dije... pa mi es espía de una potencia extranjera, basta ver
como aligera, cuando se acerca un milico, entón, no abre ni el pico,
sólo dice vender peras.
A la sobrina del cura le ha vendido un
refajo y le da mucho trabajo... más sacarlo que ponerlo, hay gente
que viene a verlo al refajo del carajo.
Cuidao con ese turco,
que igual le vende un tranvía que un bujero de alcancía o una
tortilla sin huevos y hace pasar como nuevos, los cantares de Rui Díaz.
Tanto vende un Carnaval como un ombú o tulipán, !ojo con el
otomán! que se sabe bien las Leyes, ha destronado ya, Reyes... !se
lo dice Xanda Xan !.
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