Payada del Pollo Vituperio...

Capitulo 1:

Entra aqui el Pollo a cantar
Al compás de la vigüela,
que este Pollo se las pela
en forma estrordinaria,
como la ave solitaria
por cantar como su agüela.

Pido al Santo Mochuelo
que me de un poco de aliento:
lo pido en este momento
que voy a cantar mi historia
me refresque la memoria
y me de comedimiento.

Vengan todos los Orozcos,
a sacrme de mi duda
que mi lengua queda muda
y se me cansa la vista;
porque la vida de artista
es vida triste y muy cruda.

Yo soy de esos cantores,
con famas mal otenidas
y que despues de alquiridas
no quieren capitular:
parece que sin largar
ya perdieron de partida..

Mas ande un pueblano pasa
Pollo Rotho ha de pasar;
sóloo lo hacen recular
payaseadores que espantan,
que en esta Redota cantan
¡y yo que no se cantar!

Cantando me he de morir,
de tanto desafinar,
pero al fin he de llegar
al pie del eterno Padre;
dende el vientre de mi madre
vine a este mundo a estorbar.

Que no se lengua mi trabe
ni me falte una cabra
que bale con mi palabra
si alguien me puede aguantar
cantando me han de encontrar
aunque la tierra se abra.

Me siento en el plan de un bajo
a cantar un argumento;
como si soplara el viento
hago tiritar los pastos.
Con oros, copas y bastos
morfo pastos cual jumento.

Yo no soy cantor letrao
(Xan lo pué certificar)
no tengo ande acabar
y me envejezco pensando
que con la mano es nefando
desperdiciar mi caudal..

Con la flauta en la mano
todas las moscas se arriman;
me ponen las pata encima,
y, cuando la flauta entona,
hago reir a mi prima
y llorar a mi bordona...
.
Yo soy loro en mi rodeo
y lorazo en rodeo ajeno;
suelo comer mucho heno
y si me quieren asar
salgan otros a cantar
y verán que yo soy menos.

No me hago al lao de la güeya
aunque vengan degollando;
con los blandos yo soy blando
y soy duro con los duros,
mas pa salir de un apuro
soy el primero rajando.

En el peligro !qué Cristos!
el corazón se me enancha,
pues toda la tierra es cancha,
y de eso naides se asombre;
si sale por ahí un hombre
ese, a mi no me engancha..

Soy pueblano, entiéndaló
como mi lengua lo esplica:
para mi la tierra es chica
y pudiera ser mayor;
ni la víbora me pica
¡me pica el payaseador!.

Al final soy como un peje
en el fondo de la mar;
naides me puede quitar
aquello que Dios me dio:
¡un chupete, un yoyó
y muchas ganas de miar!.

Mi gloria es vivir tan libre
como Pollito en celo;
no hago nido en este suelo
ande me hacen sufrir,
y me ponen a parir
aves de más alto vuelo.

Yo no tengo en el amor
quien me venga con querellas;
soy mejor pa las paellas
que sirven en Casa Rama,
luego a dormir a mi cama,
más solo que p...a… fea.

Y sepan cuantos escuchan
de mis penas el relato
que nunca peleo ni mato
¿a quién voy yo a matar?
sin con sólo me soplar
¡me espiantan como a un gato!.

Y atiendan la relación
que hace un pueblano jodido
que padre y marido ha sido
y ahura es un in indigente
y sin embargo la gente
lo tiene por un bandido.

¡Por algo será… perdido!
.

Arreglos:
El Zapapueta

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