Partículas irrisorias
de miasmas aviculares,
concéntricas, circulares,
invaden el plasna sano
que a base de somontano
conserva sus cualidades.
De perecidas edades,
nos llegan ecos lejanos
de seres infrahumanos,
necios, cariacontecidos,
de inexpresivos piídos
y patas en vez de manos.
En bacanal, los marranos
hozan las heces ciscadas
bazofias excrementadas
por avecillas dolientes,
cagarrinas malolientes,
y pechugas dislocadas.
Mandíbulas horadadas
de masticar inmundicias,
falacias, falsas caricias,
buchoneos en orejas
de curas con cuatro cejas
amantes de las delicias.
Y sofismas y malicias,
de seres descerebrados,
en pollos reencarnados
con regusto pal castigo:
La cizaña en el trigo,
la ponzoña en sus bocados.
Fósiles recuperados
de ignotos albañales,
arúspices de mil males
mensajeros del diablo,
nacidos en el establo,
entre materias fecales
Las tinieblas los protegen,
la luz los empaidece,
veneran los martes trece,
la envidia les rezuma
surgiendo en forma de espuma
que lo que roza, envilece.
de miasmas aviculares,
concéntricas, circulares,
invaden el plasna sano
que a base de somontano
conserva sus cualidades.
De perecidas edades,
nos llegan ecos lejanos
de seres infrahumanos,
necios, cariacontecidos,
de inexpresivos piídos
y patas en vez de manos.
En bacanal, los marranos
hozan las heces ciscadas
bazofias excrementadas
por avecillas dolientes,
cagarrinas malolientes,
y pechugas dislocadas.
Mandíbulas horadadas
de masticar inmundicias,
falacias, falsas caricias,
buchoneos en orejas
de curas con cuatro cejas
amantes de las delicias.
Y sofismas y malicias,
de seres descerebrados,
en pollos reencarnados
con regusto pal castigo:
La cizaña en el trigo,
la ponzoña en sus bocados.
Fósiles recuperados
de ignotos albañales,
arúspices de mil males
mensajeros del diablo,
nacidos en el establo,
entre materias fecales
Las tinieblas los protegen,
la luz los empaidece,
veneran los martes trece,
la envidia les rezuma
surgiendo en forma de espuma
que lo que roza, envilece.
.....
Xancele
No hay comentarios:
Publicar un comentario